Herpetonumismática (o como perseguir herpetofauna en les monedas)

El mundo de la numismática, el estudio de las monedas y el coleccionismo que gira a su alrededor, es una de las aficiones más comunes a nivel mundial. Por su inmensa variedad de artes, metales utilizados, valor histórico o económico, sean los que sean, hay muchos motivos que hacen que gente de lo más diversa colecione monedas. Hay quien sólo colecciona monedas de un país o período histórico determinados, otros que lo hacen sólo de un tipo de metal, o los que en cambio buscan atesorar monedas que presentan algún tipo de error producido al momento de acuñación. Y también, hay quien colecciona monedas que muestran en el anverso o reverso animales.

Desconozco si dentro de esta variante hay alguien en el mundo que se dedique a recopilar monedas con representaciones de herpetofauna. Y si el lector está preguntando si existen monedas donde figuran reptiles o anfibios en alguna de sus caras, la respuesta es: sí. De hecho una de las primeras monedas que existen tiene en su anverso representada una tortuga del género Testudo. Es el caso de una moneda de electro (amalgama de oro y plata) producida en la isla griega de Egina alrededor del año 700 a.C., aunque desde esta ceca se continuarán durante siglos emitiendo monedas con representaciones de tortugas de tierra en su anverso.

Así que sí, la relación entre monedas y herpetofauna es muy antigua, prácticamente desde sus orígenes en el mundo occidental. Con esta cuestión en la mente se me ocurrió revolver en la colección familiar de monedas que hemos ido acumulando, primeramente mi padre y después yo. Y a los pocos minutos encontré dos ejemplos diferentes de monedas con representaciones de reptiles.


Reverso de una moneda de 50 rupias indonesias de 1996, con la representación de un dragón de Komodo (Varanus komodoensis).

Si hay un reptil emblemático en la actualidad es el dragón de Komodo, Varanus komodoensis, el mayor de los lagartos (sub-orden Lacertilia) que existe actualmente y que habita en las islas indonesias de Komodo, Flores, Rinca, Gili Dasami y Gili Montang. Conocido mundialmente, fue escogido por la República de Indonesia para aparecer en el reverso de las monedas de 50 rupias indonesias entre los años 1991 y 1999, representando un individuo adulto en posición erguida hacia la izquierda, en un estilo realista. La aleación es bronce de aluminio y sus medidas son 19,94 milímetros de diámetros por 1,59 milímetros de espesor, con un peso de 3,2 gramos.


Reverso de una moneda de 2 centavos de dólar australiano de 1975, con la representación de un lagarto de gorguera (Chlamydosaurus kingii).

Hay pocos reptiles en el mundo que sean tan conocidos como el dragón del Komodo y uno es el sahuliano lagarto de gorguera, Chlamydosaurus kingii. Este agámido, que habita el sur de la isla de Nueva Guinea y el norte de Australia, fue escogido por este último país para figurar en el reverso de las monedas de 2 centavos de dólares australianos emitidas entre los años 1966 y 1991, compartiendo pecunia con Isabel II de Inglaterra en el anverso. La composición utilizada intenta que la representación del reptil ocupe casi toda la superficie del reverso, con la gorguera desplegada en posición defensiva, y es obra del grabador Stuart Devlin (como puede verse con su marca "SD" entre los dedos de las extremidades anterior derecha y posterior izquierda). La aleación es bronce y sus medidas son 21,6 milímetros de diámetros por 2 milímetros de espesor, con un peso de 5,2 gramos.

Con un poco de paciencia y gracias a Internet es fácil encontrar más. Por ejemplo, cocodrilos que aparecen tanto en monedas de Jamaica hace pocas décadas como también en denarios de plata de hace más de 2.000 años, emitidos por el emperador Augusto en conmemoración de la conquista romana de Egipto. Un mundo de lo más curioso vinculado al impacto de la herpetofauna en las culturas humanas del pasado y del presente.

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